jueves, 16 de noviembre de 2023

La catarsis que viene

Casi al mismo tiempo que en el Congreso de los Diputados, Pedro Sánchez era investido presidente del Gobierno, el Parlamento Europeo hacía público que debatirá sobre la concesión de la amnistía y la situación del Estado de Derecho en España.

La conferencia de presidentes, que reúne a los líderes de todos los grupos políticos, ha decidido por mayoría incluir este debate de urgencia en el pleno de Estrasburgo, el próximo miércoles 22, a las 14.00. Bien es cierto que el debate no conlleva una resolución y tampoco tendrá una votación vinculante, pero sin duda va a ser la llegada a la Eurocámara de la discusión sobre una anomalía contra la Constitución y la separación de poderes, en uno de los grandes países miembros de la Unión Europea, además gobernado por un dirigente socialista.

Al menos, según los independentistas catalanes, previamente el lunes 20, con Puigdemont y los cuatro verificadores internacionales incluidos, se deberá reunir en Suiza la mesa de control para el seguimiento del cumplimiento de los acuerdos alcanzados entre el PSOE y Junts, para el apoyo a la investidura del candidato socialista y, desde hoy, de nuevo presidente del Gobierno de España.

Y antes, el sábado 18, los parlamentarios europeos también tendrán la oportunidad de asomarse a la manifestación convocada en Madrid contra la amnistía y los ataques a la separación de poderes, el Estado de Derecho y la Constitución.

Además, incluso antes, estoy convencido de que los socios que, entre demandas y exigencias, han hecho de nuevo presidente a Pedro Sánchez, competirán por ser los primeros en empezar a pasar facturas al cobro y, sin solución de continuidad, irán expresando sus reclamaciones y amenazas de forma fluida, y no precisamente marcadas por la cortesía, dejando su rastro en las hemerotecas de los próximos días, contribuyendo a aportar un bonito y esclarecedor dossier complementario para cuando los parlamentarios europeos debatan formalmente sobre el asunto, el próximo miércoles.  

Óscar Wilde dijo en una ocasión: “Ten cuidado con lo que deseas, se puede convertir en realidad”. Pedro Sánchez ha cumplido su deseo y, de momento, le hemos visto reírse mucho durante la sesión de investidura… incluso a veces de forma inquietante recordando a célebres malvados psicópatas del cine que a todos nos pueden venir a la cabeza.

Pero seamos generosos, y aunque una gran parte de los españoles, entre indignados y avergonzados, lo estén pasando mal, dejemos que siga celebrando y disfrutando hasta que se dé cuenta o se lo hagan saber, dónde se ha metido, con el regalo añadido de que él mismo se heredará a sí mismo, el desastre que ha creado durante su anterior mandato.

Vienen tiempos muy difíciles para los que tenemos que prepararnos y en los que cualquier cosa puede suceder. Es posible que, al contrario de nuestro flamante presidente, nos cueste encontrar algún motivo con el que poder reírnos… Pero tampoco es tiempo de lloros ni de estar tristes… Hay veces en las que una buena catarsis se hace imprescindible para que las cosas comiencen a solucionarse… y sin duda éste es uno de esos momentos. Mucho ánimo.

Ángel Alonso

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