El candidato

En nuestro circo patrio cotidiano ya tenemos de todo y no falta de nada. Lamentablemente no hablamos del tradicional mayor espectáculo del mundo, sino que nuestro país está dando el espectáculo ante el mundo. Definitivamente los responsables políticos han perdido el juicio y no tienen conciencia del daño que están haciendo a la imagen de España.

Vale que ya no pintábamos nada en el concierto internacional, pero, además, ahora somos el vecino incómodo que siempre está dando la nota, montando escándalos y armando bronca sin parar. Basta preguntar al hijo o al familiar que, quien más o quien menos, tenemos viviendo en el extranjero, para que nos confirmen el mal concepto y la baja valoración que tienen de nosotros, los ciudadanos de los países de nuestro entorno.

No lo entiende nadie… Hasta los relojes parados dan bien la hora dos veces al día, pero aquí es como si, cuando el reloj está a punto de acertar, alguien estuviera siempre pendiente de retrasarlo para que el reloj nunca acierte.

Cuando las cosas van mal y es difícil suponer que puedan ir a peor, con una habilidad fuera de lo común y superándose en cada ocasión, van nuestros dirigentes y consiguen empeorar cualquier situación. Me temo que, cuando pase esta pesadilla, España entera va a necesitar psicólogos y terapia de grupo para superar traumas y reconciliarnos entre nosotros, y con nosotros mismos… En lo económico y social, no creo que consigamos recuperarnos en menos de doce o quince años de duro esfuerzo…

Dicen que quien nos ha metido en el lío en el que estamos, aspira a arreglar también la Unión Europea… Independientemente de los apoyos que pudiera reunir y llegado el momento, seguro que Putin desplegaría todo su potencial en la sombra y le apoyaría… Convencido de que no va a encontrar una forma más eficaz y económica de destruir la Unión Europea, el líder ruso maniobraría con entusiasmo para ungir como líder europeo a quien, en tan solo poco más de cinco años y con un empeño encomiable, va a dejar a España como un solar.

Definitivamente, cuando se dé la situación, Putin no encontrará un candidato mejor. Por mucho que busque, no encontrará un currículum de destrucción tan brillante y al que no hay que controlar, ni dedicar tiempo, ni nada… Basta con dejarle hacer, despreciarle de vez en cuando y aguardar a ver qué pasa.

Pero seguro que aquí no acabarían las alegrías para el candidato. Además del apoyo de quienes controlan el lobby internacional super guay en la sombra, es muy posible que el entusiasta aspirante a mandamás europeo también contase con el apoyo del líder de al otro lado del charco. Qué mejor panorama para Biden que una Unión Europea sumisa y dependiente.

Lo miremos como lo miremos, como diría un castizo, estamos jodidos… Al menos ya estamos curados de espanto y, pase lo que pase, lo veremos venir y podremos tomárnoslo con sentido del humor y reírnos de las caras que vayan poniendo los ciudadanos de los otros países vecinos… Al final, todo es tan previsible que sólo da para un mal guion.

Ángel Alonso