jueves, 15 de septiembre de 2022

Los idiotas

No se habla de otra cosa… Se dice que el miércoles pasado, con motivo del partido de Champions del Real Madrid, el único tema de conversación entre los aficionados en los accesos al Estadio Santiago Bernabeu, era el de la urgente necesidad de renovar el Consejo General del Poder Judicial…

Hay quien comenta que, debido a la gran ansiedad que ha creado el estar pendientes de la citada renovación, se han agotado las reservas de valeriana y demás infusiones relajantes e inductoras del sueño… Y, en los últimos días, las autoridades competentes han expresado su preocupación por el aumento de las reyertas entre ciudadanos que están a favor de la renovación y los que no…

Es normal y no es para menos… Es evidente que ahora mismo no hay nada que nos preocupe más… Es un sinvivir… Tanto es así que vamos a comprar al mercado o al supermercado, y la subida de los precios nos parece una minucia, sin apenas importancia, ante la catástrofe que para todos supone la pendiente renovación judicial…

Es horrible… Dicen que hasta los niños, contagiados de la desazón de los padres, apenas rinden en los colegios… Es cierto que, aprovechando esta circunstancia, hay voces maledicentes que andan agitando y sembrando la duda por ahí, afirmando que la desazón de los padres viene motivada por el riñón que les han costado los libros, material, uniformes y todos lo necesario para que sus hijos hayan iniciado el curso escolar en septiembre… Nos la quieren colar, pero no lo van a conseguir… Pero que no nos la cuelen… El tormento y cara de ajo de los padres no viene motivado por el generoso desembolso que han tenido que realizar para la vuelta al cole… Qué va… La causa de la congoja no es otra que el sinvivir que provoca la no renovación del Consejo General del Poder Judicial.

Vale que suba el IPC, las hipotecas, el gas o la electricidad… Incluso podemos asumir que el paro se dispare y que la inflación nos hunda en la miseria… ¿Son cosas que preocupan? Puede ser… Pero, por supuesto, la inquietud que pueden provocar todas esas cosas no es para nada comparable al desasosiego que produce el que el órgano de los jueces esté todavía sin renovar.

Se nos va a hacer muy largo lo que queda de Legislatura con una oposición de malas personas, a oscuras y fumando puros en cenáculos, que disfruta con nuestro sufrimiento y que no se aviene a razones para dejar hacer al líder Antonio, lo que tenga que hacer… Porque eso sí, Antonio es un tío honesto, con habilidad y acierto en la gestión, que tiene perfectamente claro lo que es importante, las prioridades y lo mejor para todos nosotros…

Está claro que, ahora mismo, el mayor problema de España y para todos nosotros es la renovación pendiente del Consejo General del Poder Judicial… Que no nos líen, ni traten de confundirnos… De eso nada… A ver si van a creer que somos idiotas…

                                                                                                     Ángel Alonso


No hay comentarios:

Publicar un comentario