El 14 de enero de 2013, en su 67ª Asamblea
General, la ONU aprobó formalmente la proclamación de la UNESCO del Día Mundial
de la Radio, a propuesta de España, impulsora de un
proyecto original de la Academia Española de la Radio… El día elegido para la
celebración fue el 13 de febrero, día en que se creó Radio Naciones Unidas en
1946.
Hablar de la radio es hablar de un medio
de comunicación imprescindible por su bajo costo y por su capacidad de penetración,
siendo capaz de llegar a los sitios más remotos. La radio cumple su función informativa,
de entretenimiento y, a veces, didáctica, independientemente del nivel
educativo del oyente, siendo el medio más apropiado para los sectores más
vulnerables de la población. Además, por su rapidez, flexibilidad y adaptación,
la radio es también el medio más contrastado y eficaz en situaciones especiales
o de emergencia.
Aunque con la evolución y asentamiento de
las nuevas tecnologías, y con ellas la aparición y desarrollo de nuevas formas
de comunicación, pudiera parecer que la radio pudiese quedar relegada, lo
cierto es que la radio goza de una excelente salud, manteniéndose hoy en día en
la vanguardia informativa, por su inmediatez y por su sencillez de medios…
Gracias a la forma más elemental y compleja, que es la palabra hablada, la
radio no solo consigue contar y transmitir mensajes e ideas, sino también
sensaciones, contando para ello con la colaboración de un gran aliado: el poder
de la imaginación…
La radio forma parte de nuestras vidas.
Con tan solo sintonizar el dial del transistor nos hemos convertido en testigos
de acontecimientos, experiencias, alegrías, sinsabores, éxitos y fracasos,
compartidos a través de las ondas… Desde la información más cercana, a las
crónicas de los corresponsales de guerra… Desde los concursos y el
entretenimiento, a la voz solidaria de aquellos que ayudan en los lugares en
los que más se les necesita… Desde las gestas deportivas, a traspasar las
fronteras del conocimiento… De la cultura y los logros del espíritu, a viajar
hacia los horizontes ilimitados de la imaginación…
Recuerdo como hace casi veintidós años debuté,
sin apenas habérmelo planteado, en un medio que apenas conocía… Aquel sábado 11
de mayo de 1996 sometí a un castigo inenarrable a la poca audiencia que pudiera
tener en aquel momento, haciendo el peor programa de mi vida… Aquella
maravillosa audiencia “me indultó” y permanecí en antena durante catorce
temporadas viviendo una etapa maravillosa, sintiéndome periodista y un
privilegiado por disponer de la oportunidad de comunicar y transmitir,
vivencias y sensaciones…
Después de tanto tiempo y con motivo de
esta celebración, se me ocurre que es una buena oportunidad para agradecer la generosidad de
aquellos que apostaron por nosotros, a la audiencia y a todos los que, desde el
primero hasta el último programa, con grandes dosis de trabajo y un poco de talento,
hicimos de un programa de radio una apasionante aventura que, estoy
seguro, a muchos nos gustaría volver a vivir… Feliz Día Mundial de la Radio…
Ángel Alonso
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